jueves, 14 de marzo de 2013

A veces...

     A veces...uno siente cosas que jamás puede explicar, sin encontrar palabra que suene aceptable según el contexto, sin que suenen excesivamente tajantes o lapidarias.

     El caso es que por diversas razones, ando embarcado en solucionar problemas del mejor modo posible.

     "Eso que no se puede explicar" podría ser soledad, pero no lo es, hay gente que me apoya, me pregunta, e intenta ayudarme. Podría ser un concepto indefinido, nombrémoslo "frio", pero es algo evidente, hace frío y tampoco se a ciencia cierta si esa es la palabra adecuada.

      Para explicar un poco todo, tengo que andar tomando decisiones, rápidas, radicales, y es en algo en lo que poco consejo es realmente válido.
   
     Quiero decir, todos son bienvenidos, pero para ser aplicables, nos tendríamos que poner unos cuantos dias a diseccionar la situación, con lo cual es tiempo perdido que no puedo ver alejarse.

     Hoy otra vez a pegarme la caminata, a intentar tentar la suerte y normalizar este pedazo de mierda que tengo entre manos actualmente.

No es fácil aceptar que tu madre ya no es capaz de hacer ciertas cosas. Nada fácil. 

     En una entrada de hace tiempo, la cual no se si borré o no, hablaba del paso del tiempo. Que pasamos de ser hijos a ser padres de nuestros propios padres. Y a veces también de nuestros hijos.

     Es un sentimiento complejo. Hace bien poco, si, sabias que físicamente tu madre ya tenía cierta edad y por lo tanto, tenias que hacer tu muchas cosas, pero nada importante. Sabías que si tenías un problema, te iba a escuchar, y te iba a apoyar. Y te ibas a sentir de maravilla tras hacerlo.

Ahora para empezar ni oye. 

     Estuvo en el hospital por un catarro a últimos de Enero. Tenía 73 años. Salió a mediados de Febrero con un año mas ( vaya familia de mierda que NADIE la felicitó) y como con 20 años mas encima.

     De repente la cuesta mucho andar, no oye nada, apenas quiere comer, no duerme mucho.

     Antes se enteraba del mundo teniendo la televisión puesta a todas horas, que si walking dead, luego castle, un poco de noticias, enterarse de que había hecho el madrid ( si, ella es la futbolera en esta familia), para terminar con alguna película del syfy.

     Esa era su vida antes de su ingreso en el hospital. Antes de cumplir 74. Con 73 años que de cosas hacía...y de repente no hace ninguna.

     No puedo ocultar mi preocupación obviamente, soy su hijo. Aunque tenga que andar solucionando mas asuntos de vital importancia, el dinero viene y va.
     
     "Esas personas" cuando se van, siempre dejan muchas cosas por hacer, escuchar...que jamás te planteaste decir o hacer con ellas.

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